Entrenar con él ha sido una de las mejores decisiones que he tomado. Desde el primer día me trató como un amigo más, no como un simple cliente, y eso hizo que todo el proceso fuera mucho más motivador.
Me diseñó una rutina totalmente personalizada, adaptada a mis objetivos y a mi ritmo. Además, me preparó un plan de alimentación realista, fácil de seguir y sin cosas imposibles. Pero lo que más destaco es el seguimiento: siempre está disponible por WhatsApp para cualquier duda, consejo o para darme ese empujón cuando flaqueo.
Las videollamadas semanales me ayudaron muchísimo a mantenerme enfocado y a ver mis avances de forma clara. Se nota que realmente le importa tu progreso y tu bienestar. Gracias a su apoyo y dedicación, no solo he mejorado físicamente, también me siento con más energía, motivado y feliz.
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