Soy una apasionada de mi trabajo. Tengo una fuente constante de motivación que me impulsa a dar lo mejor de mí. En mi último trabajo esta pasión y sentido de responsabilidad me permitieron desafiarme a mí mismo diariamente para aprender nuevas habilidades que me llevaron a hacer mejor mi trabajo. Mis expectativas con mis alumnos eran poder relacionarme libremente donde la comunicación fuera viva, activa, positiva y con una actitud acogedora en beneficio del alumno y su progreso en el aprendizaje. Establecí metas desafiantes con expectativas que eran claras tanto oralmente como por escrito. También hice énfasis en animar a los estudiantes a escribir y hablar bien. Si fuera necesario, analizé progreso con ellos y los alenté a expresar sus problemas de cómo se sintieron con su transcurso y prever cualquier posibles cambios que beneficiaría su proceso de aprendizaje. Muchas veces, con ejemplos de la vida real y el juego de roles se implementa con gran entusiasmo. Mi experiencia docente también me ha dado la oportunidad de animar a niños y adultos a valorar quiénes son y lo que son capaces de lograr.