El método de enseñanza varía acorde a los objetivos e intereses del alumno, pero siempre fomentando un trabajo paralelo de instrumento y teoría.

Las clases tienen una duración de 1 hora, en la cual se resuelven dudas, practican ejercicios y se ve repertorio. También se trabajaran distintos estilos musicales como rock, funk, metal, pop, balada, clásico, bolero, anime, videojuegos, películas, entre otros. Cabe mencionar que hay mayor progreso si existe estudio y práctica del alumno durante la semana.

Dentro del ámbito teórico se enseñara lectura y escritura de partituras como de tablaturas (en caso de ser necesario), construcción de acordes, armonía, entre otras cosas dependiendo de los intereses del alumno.

Por su parte en el área de composición y arreglos se trabajará construcción melódica, composición en estilos, trabajo armónico y rítmico, además de poder componer para diversos instrumentos inclusive si el alumno no toca dicho instrumento, como por ejemplo: violín, trompeta, saxo, clarinete, percusión, etc...

A modo general se busca mejorar el dominio del instrumento, la técnica y habilidad, todo soportado por conocimiento teórico y práctico para su mayor entendimiento. El cual se complementará con diverso material acorde al alumno en cuestión, siendo este el foco al momento de crear la clase, siguiendo su desarrollo e interés para crear así una clase personalizada, manteniendo ciertas guías y materias que se consideren beneficiosas para el desarrollo que se busca, por lo que se apunta a formar un músico completo y con independencia para que pueda afrontar los diversos desafíos que se le puedan presentar.